Nuestro establecimiento educacional se ha visto, como todos los espacios educativos formales e informales, afectado por la pandemia e imposibilitado de generar actividades presenciales, por lo que todos nuestros esfuerzos, de toda la comunidad educativa, ha sido reinventarnos en la virtualidad, sorteando todos los obstáculos que en ella afloran, entre ellos la accesibilidad y la brecha digital, cuestión que hemos resuelto con gestiones que nos permiten llegar a la mayor cantidad de familias.
El Proyecto SEA 2020 nos interesó desde el primer momento ya que nos presenta una alternativa muy atractiva para acercarnos a nuestros y nuestras estudiantes y a sus familias con actividades centradas en la educación artística como camino motivador y activador en la construcción de conocimientos.
Esta invitación nace desde el Museo Histórico de Yerbas Buenas, de nuestra comuna, a trabajar en el proyecto desde el mes de septiembre. Con elementos del teatro, la pintura, la escultura y otras expresiones artísticas, hemos logrado un gran nivel de participación, donde se nota el compromiso de las familias en el desarrollo de las actividades propuestas.
Las actividades han estado intencionadas por un personaje conocido por nuestra comunidad, el Rana Lechuga, quien protagonizó la miniserie Viviendo en el Museo, quien desde este nuevo escenario que es nuestro Liceo, invita, motiva y convoca para las diferentes tareas que los y las estudiantes deben realizar. Este personaje, títere de cuerpo prestado, ha sido sumamente importante en este proceso, ya que niños y niñas esperan semanalmente que el Lechuga les envíe alguna actividad, entre ellas: juegos tradicionales, elaboración de maceteros con material reciclado, taller de elaboración de títeres, recreación de personajes de la vida cotidiana de la época colonial, huertos de hierbas medicinales, y por supuesto lo que se viene para finalizar el proyecto, la colección afectiva familiar, que se encuentra en proceso.
Cada docente ha logrado incentivar a sus estudiantes, enviado cápsulas, pautas, y estableciendo vínculos curriculares para aprovechar de intencionar la construcción de conocimientos desde distintas disciplinas, lo que ha enriquecido notablemente el proceso.
Esperamos seguir trabajando en este contexto para que el próximo 19 y 20 de noviembre,
podamos llevar al Museo las obras realizadas por nuestros niños y niñas, además de sus
colecciones afectivas. Como posiblemente no lo podremos visitar, elaboraremos estrategias
virtuales para que toda nuestra comunidad pueda ver las obras relevadas en la exhibición
permanente del Museo.