jueves 21 noviembre 2024
Mediación artística como vínculo
Espacios de diálogo, Circuitos culturales

Como todos sabemos los museos son tan diversos como la creatividad humana, vienen en todos los tamaños y formas; estos contienen los más disimiles objetos, desde elementos arqueológicos (Museo arqueológico y de Historia Natural), hasta zapatos y vestidos (de la moda y el diseño). Además cada uno de ellos posee su propia administración, un modelo de gestión particular, objetivos y estructura propia.

Estos espacios no solamente poseen colecciones de objetos y sus respectivas historias; sino que también son lugares de interacción entre las personas, lugares de encuentros y desencuentros, instancias de aprobaciones y también recusaciones. Estas interacciones se configuran en gran medida según como el museo se relaciona con el público, que recursos utiliza, cómo expone sus contenidos y si este genera diálogos con el visitante.

De todas las formas posibles de relacionarnos con el público, una de ellas es la Mediación. Habitualmente escuchamos esta palabra como si fuera una especie de “puente” que conecta dos partes en conflicto, por un lado el espectador y por otro la obra. El “conflicto” vendría siendo la relación y vinculación que se genera entre ambas partes.

Interesante es la perspectiva que le da la historiadora del arte Kaija Kaitavuori a este tema: “No es suprimir conflictos, sino entenderlos, facilitarlos y hasta producirlos”[i]

La mediación es teoría y práctica al mismo tiempo, puesto que relaciona conocimientos con la interacción directa con el otro, esto nos permite desarrollar una conversación con el espectador. La mediación es la vinculación directa con la comunidad en general.

Según esta perspectiva nos parece congruente la aplicación de mediaciones en nuestro Museo de Bellas Artes, puesto que el arte en su fundamento es ser un medio de comunicación y la base de la mediación, precisamente, es el diálogo. Pero estas acciones no se acotan solo al diálogo, nosotros buscamos crear un espacio de intercambio de conocimientos y experiencias en torno al arte (en distintos niveles de complejidad) entre la obra, mediadores, especialistas, visitantes y estudiantes.

¿Siempre es necesaria la mediación entre espectador y obra de arte? ¿Realizar mediaciones es algo impositivo, con sesgos de paternalismo? Sí son necesarias, pero en ocasiones no, depende mucho del interlocutor.  Debemos recordar que un museo es un espacio vivo en el cual se generan múltiples interacciones, es un entorno de diálogo, de disfrute contemplativo, pero también una instancia real de aprendizaje, la cual necesariamente requiere de la mediación. Esta última,  es la labor de nuestra área, un espacio en el que mediadores (o interlocutores) intentan dar sentido y congruencia a los contenidos exhibidos, para que de forma didáctica brindemos la posibilidad al espectador que pueda generar conexiones que lo lleven a potenciar su intelecto y capacidades reflexivas; que logre identificarse o desconocerse; que logre asombrarse y darle sentido a conocimientos pre adquiridos.

En ningún sentido deseamos asumir la labor esencial de la educación en nuestro país, siempre nos hemos considerado sólo como un apoyo a los procesos educativos de niños y jóvenes, somos una colaboración directa para el docente y su aula.

Para lograr este objetivo,  el mediador debe seleccionar, clasificar y estructurar el contenido  de la obra para otorgarle sentido en relación a las necesidades de los estudiantes. Con el tema definido, comienza ahora una etapa de aplicación de un “libreto-discurso” que responda al contenido que deseamos potenciar en nuestras contrapartes (Ej.: “El paisaje chileno”; “el paisaje de Valparaíso”; “Historia y cultura”; “temáticas patrimoniales”;  “elementos sociológicos”, entre otros).

Tratamos de brindar posibilidades de aprendizaje en un contexto definido (según las características y necesidades de nuestro interlocutor), pero no solo por medio de este “dialogo” o “visita guiada”…realizamos también talleres de plástica para niños y niñas; seminarios y charlas para especialistas; ciclos de cine para público en general; entre otras actividades que buscan potenciar ese vínculo, esa conexión sublime entre una obra de arte que logra “conversar” con su espectador.

Queremos que “el mediado” se transforme “en mediador”; que el espectador se convierta en un actor activo en el devenir de este gran museo.

Las obras de arte del Museo Baburizza quieren conocerte, ven a vivir este espacio junto a nosotros.

 

Javier muñoz A.

Encargado

Área de Mediación y Contenidos

Museo Baburizza

 

 

[i]Kaitavuori, Kaija y Nora Sternfeld. “It’s all Mediating: Outlining and Incorporating the Roles of Curating and Education in the Exhibition Context”, Finlandia: Finnish Association for Museum Education Pedaali, 2014.

• Nuñez, Angélica. “El museo como espacio de Mediación: lenguaje de la exposición museal”:Universitas humanística N°63 – 2007 – Colombia
• Hernández, Francisca. “El museo como espacio de comunicación”. Gijón: Trea. 2003.
• ICOM UNESCO – http://icom.museum/